A rehabilitación Edwin Valero

Edwin Valero, fuertemente custodiado, portando casco y chaleco antibalas llega al Iahula

**** El campeón mundial fue trasladado bajo fuertes medidas de seguridad a las instalaciones del Iahula, en donde se habilitó un tribunal debido a que su esposa permanece allí recluida



Mariela Escola
CAMBIO DE SIGLO

Luego de varias horas de deliberación en la audiencia judicial, efectuada por el Tribunal Sexto de Control, a cargo del juez Hediberto Antonio Peña, fue condenado a permanecer en un centro de rehabilitación el campeón mundial de boxeo Edwin Valero, luego que fuera acusado de golpear salvajemente a su esposa y causarle lesiones graves que la mantienen recluida en el Instituto Autónomo Hospital Universitario de Los Andes (Iahula).

Valero fue sentenciado a seis meses de rehabilitación por serios problemas con el alcohol, una vez que golpeó a su esposa, Jennifer Carolina Viera, quien presentó hematomas y una lesión de costilla que trajo como consecuencia la perforación de su pulmón.

Valero, ante el juez de la causa, culpó a sus adicciones de todo lo que ha sucedido en su vida y se declaró adicto, según fuentes tribunalicias contactadas en el lugar de la audiencia, es decir, el Iahula.

Cabe señalar que Valero fue custodiado por funcionarios policiales pertenecientes a Polimérida, con chaleco antibalas y casco, para hacerle frente a cualquier situación que pudiera generarse con este deportista acusado por maltrato intrafamiliar.

El titular del tribunal que conoció de la causa escuchó los planteamientos de Valero, y al éste confesarse adicto lo condenó a seis meses de rehabilitación en el hospital psiquiátrico San Juan de Dios.

Ayer mismo, el pugilista fue trasladado a la sede del centro de salud, ubicado en el sector Los Curos de la ciudad de Mérida, donde pasará seis meses y luego será nuevamente evaluado, además que debe recibir algunos talleres ante las organizaciones que trabajan en el maltrato intrafamiliar, para ayudarle a superar la vergonzosa práctica de golpear a su núcleo familiar.

Uno de los alegatos esgrimidos por la defensa del boxeador es que éste pasaba por una fuerte depresión a causa de sus adicciones y eso desencadenó la golpiza a su joven mujer.