“Pero el problema fundamental del país más que el agua, la electricidad y más que todo es la unidad y el reconocimiento mutuo de los venezolanos como una sola fuerza"
UNION RADIO
***El presidente del Concilio Plenario de Venezuela, monseñor Ovidio Pérez Morales, reiteró este jueves que la unidad es la meta que deben tener todos los venezolanos, porque el país no avanzará mientras los distintos sectores de la sociedad estén divididos.
Añadió en Unión Radio que los obispos deben denunciar y dar su testimonio sobre los problemas graves del país. En este sentido, citó como ejemplo que “la inseguridad, el secuestro y el sicariato mantiene en zozobra al país; y ahora también las necesidades en servicios como agua y electricidad”.
“Pero el problema fundamental del país más que el agua, la electricidad y más que todo es la unidad y el reconocimiento mutuo de los venezolanos como una sola fuerza, no podemos avanzar con un fraccionamiento del país, no se puede caminar con una sola pierna y hay sectores que pretenden caminar con una sola pierna hacia el futuro”, advirtió.
Pérez Morales fustigó la actitud de discriminación, marginación y descalificación del gobierno con la Iglesia Católica. “Queremos que se supere esa situación, los pastores de la Iglesia quieren colaborar en la construcción del país y quieren dar su voz”, afirmó.
Al comentar sobre el informe que publicó el Departamento de Estado de EEUU el cual critica el acoso a la libertad de culto en Venezuela, aclaró que hay una diferencia entre la libertad de culto y la libertad religiosa.
“La libertad de culto está inmersa en la libertad religiosa”, en tanto que “la libertad religiosa es algo más y tienen entre sus expresiones la libertad para que el creyente asuma su fe y la traduzca en el relacionamiento social y que esa fe pueda traducirse en participación en la educación de una comunidad y un país; así como pueda también manifestarse en una presencia activa en la organización política y cultural de una nación”.
Agregó que en la libertad religiosa también está incluido el respeto a las instituciones y a los credos de un determinado país “sin que esto implique que el Estado asuma una posición de confesión al respecto; es decir, el Estado no tiene por qué definir ser en un determinado sentido de confesión religiosa”.
A su juicio, el estado debe respetar y abrir las puertas para que los creyentes tengan sus manifestaciones en los diferentes sectores o ámbitos de la vida social.
Comentarios
Publicar un comentario
MÉRIDA DIGITAL NO SE HACE RESPONSABLE DE LAS OPINIONES EMITIDAS POR LOS USUARIOS