“Estallido social del 27F dio paso al nacimiento de la Revolución”

Diógenes Andrade

Para el Secretario General de Gobierno del estado Mérida, el 27 de febrero fue la fecha precisa en que el bravo pueblo despertó para siempre. “Fue el inicio para que uniformados y civiles despertaran para nunca más dormir, para mantenerse atentos a la defensa de los derechos venezolanos”

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A propósito de la conmemoración de los 20 años del “Caracazo”, Diógenes Andrade, secretario general de gobierno, ofreció sus impresiones con respecto a ese acontecimiento que marcó un antes y un después en la historia contemporánea y política de Venezuela.

“Así como el 23 de enero de 1958 marcó un precedente en la democracia representativa, los días 27 y 28 de febrero de 1989 sellaron un antes y un después en la historia venezolana que culminó con la gran jornada del 4 de febrero de 1992, donde un grupo de jóvenes patriotas manifestaron su inconformidad con lo que había sido la gran ofensiva de la democracia representativa, una de las más corruptas que ha existido en nuestro país”, apuntó Andrade.

Explicó que el 27F de 1989, producto de una severa crisis económica por el anuncio de medidas neoliberales tomadas por el presidente de entonces, Carlos Andrés Pérez, quien había sido electo pocos días antes para su segundo periodo, explotó la paciencia del pueblo y nació la necesidad de un cambio: una revolución.

Detrás de esas medidas se encontraba el Fondo Monetario Internacional (FMI) y las mismas formaban parte del llamado Paquete Económico, que incluía la privatización de empresas públicas, la eliminación de las subvenciones y protección del Estado a empresas privadas, así como el fomento de la descentralización.

“La chispa de la protesta nació en Guarenas, estado Miranda, y se extendió hasta Caracas. Miles de venezolanos salieron a la calle y el gobierno de Pérez vertió sobre ellos una masacre utilizando para eso a la Guardia Nacional y al Ejército”, recordó la autoridad regional.

“Mérida fue una de las ciudades que tenía una gran jornada de protesta desde el 23 de enero de 1989, pero casualmente el 23 de febrero se dieron algunas acciones en las facultades de ingeniería y medicina. El gobernador de ese entonces, Orlando Gutiérrez, quedó atrapado dentro de la facultad y tuvo que participar en una gran protesta con los estudiantes y trabajadores de esa casa de estudios”.

Posteriormente, ante una arremetida de los cuerpos policiales para rescatar al primer mandatario regional, el propio gobernador afirmó que él estaba participando en la manifestación con los estudiantes, para evitar la represión que ya comenzaba a verse en algunos sectores populares de Mérida. Desde ese día, las autoridades universitarias decidieron suspender las actividades. Por eso, aquí en Mérida no hubo hechos que lamentar el 27 y 28 de febrero”, acotó el Secretario General de Gobierno.

Sin embargo, resaltó que a quienes participaron en la jornada de la facultad –incluyéndose él- le fueron violentados algunos derechos. “A muchos de nosotros nos secuestraron, nos llevaron detenidos y otros fueron trasladados a Caracas”.

Resaltó que a raíz de los sucesos del 27 y 28 de febrero de 1989, convicciones firmemente arraigadas como la supuesta pasividad popular, el control de la población por parte de los partidos y organizaciones establecidos, la estabilidad de la democracia, quedaron cuestionadas. La situación crítica de los años venideros (como los 2 intentos de golpe de Estado de 1992) evidenciaría dramáticamente el malestar existente en el país.

NACE LA REVOLUCION

Para Diógenes Andrade, el 27F fue la fecha precisa en que el bravo pueblo despertó para siempre. “Esta fecha marcó el inicio para que uniformados y civiles despertaran para nunca más dormir, para mantenerse despierto en la defensa de los derechos venezolanos. El estallido social, dio paso al nacimiento de la Revolución”.

Cada uno de los venezolanos guardó en su alma los tristes recuerdos y la sangre derramada ese día. Y justamente ese sentimiento produjo en el pueblo la necesidad de una verdadera revolución. Esta opción transformadora sólo la ofrecía el comandante Hugo Chávez Frías, quien el 4 de febrero de 1992 lideró una rebelión cívico militar en contra del Paquete del Gobierno de Carlos Andrés Pérez.

Los hombres que aquel febrero (4-F) aspiraban enderezar las cosas en un país cansado de la ineficiencia y la corrupción, pertenecían a 10 batallones y formaban parte de las guarniciones militares de los estados Aragua, Carabobo, Miranda, Zulia y el Distrito Federal. Fueron dirigidos por jóvenes oficiales: Hugo Chávez, Francisco Arias Cárdenas, Yoel Acosta Chirinos, Jesús Urdaneta Hernández y Jesús Ortiz Contreras, entre otros. Desde ese momento la revolución comenzó a correr por la sangre de los venezolanos. Y así Hugo Chávez llegó a la Presidencia de la República.

Con la justicia social y la democracia participativa y protagónica como objetivos claros, Chávez inició un período renovador, dirigido a refundar la República bajo una óptica socialista y a través de acciones clave como la convocatoria de la Asamblea Constituyente, contemplada como un proceso de relegitimación de todos los poderes, siempre con la participación directa del pueblo.

“Los venezolanos y las venezolanas se convirtieron desde entonces en agentes de cambio, en actores del rediseño estructural del país, concebido desde las bases y con miras a transformar para siempre la democracia representativa en participativa”, puntualizó Andrade por último. (Prensa/OCI/Elianira Gutiérrez Foto: José Angulo)