Inglaterra gana 3-2 a Suecia con gol de Welbeck y se acerca a cuartos

AFP / Kiev, Ucrania 

Con un gol de taquito de Danny Welbeck, Inglaterra se llevó este viernes en Kiev una victoria emocionante 3-2 ante Suecia en el partido de la 2ª fecha del grupo D de la Eurocopa-2012 con el que encarriló su pase a cuartos de final y hundió a los suecos, segundos eliminados del torneo.

Los goles del conjunto de Roy Hodgson, que gozará en su próximo partido de la presencia de Wayne Rooney, que ya cumplió sus dos partidos de suspensión, fueron obra de Andy Carroll (23) de cabeza, el ingresado Theo Walcott (63) y Welbeck (78), que sentenció el duelo electrizante con una obra de arte.
Para los escandinavos, que habían reaccionado con coraje hasta dar vuelta la historia, cuando quedaban eliminados con la derrota, se habían puesto 2-1 arriba con dianas de Glen Johnson (49) en contra y Olof Mellberg (59) de cabeza.

"Fue un típico partido de dos mitades. Suecia lo hizo bien remontando el marcador. Pero nosotros siempre creímos porque tenemos un espíritu tremendo en este equipo, en el que cualquiera, incluso los que ingresan, pueden hacer grandes cosas", afirmó Welbeck.

Con esta victoria los ingleses alcanzaron a Francia, ganador 2-0 frente a Ucrania a primera hora en Donetsk, en la cima de la tabla con cuatro unidades. Ucrania les sigue con tres y Suecia, ya eliminada, cierra con cero.
Ingleses y franceses buscarán sellar su pase en la próxima fecha, el martes próximo. Inglaterra chocará con Ucrania en Donetsk y Francia lo hará con la ya eliminada Suecia en Kiev.

A los ingleses les alcanzará un empate para quedar entre los ocho mejores, cuando enfrenten a Ucrania en Donetsk.

El equipo de Roy Hodgson, que comenzó su carrera como entrenador en Suecia y había dicho que afrontaba un partido especial, de paso cortó una maldición: los Pross no derrotaban a los suecos desde hacía 43 años en competición oficial, aunque en su último enfrentamiento, en un amistoso en Londres, ganaron 1-0.

Para la definición del grupo, Inglaterra llegará crecida moralmente, después de lograr un empate valioso ante el favorito Francia y dejar atrás las bajas en cadena por lesión de cuadros como Frank Lampard, Gary Cahill y Gareth Barry. Y además faltaba el suspendido Rooney.
"Wayne ha estado excelente en los entrenamientos. Necesitamos calidad para el próximo partido ante Ucrania en el que necesitamos obtener un resultado y un jugador como Rooney puede marcar la diferencia", dijo Hodgson.

En la primera parte, apenas un tanto de cabeza del atacane del Liverpool Andy Carroll (23), tras un centro del capitán Steven Gerrard desde lejísimos, bien 'british', casi calcado al de Joleon Lescott ante los galos, había servido para romper el partido, que guardó las emociones para la segunda parte.

Los escandinavos igualaron a través de un gol en contra de el defensa Glen Johnson, dueño de un doble error porque había habilitado con su salida pasiva al central Olof Mellberg (49), quien pescó una bola enredada a la salida de un tiro libre de Zlatan Ibrahimovic.

Inglaterra se enfrió y Suecia lo olfateó. Entonces, el volante Sebastian Larsson envió un balón parado desde lejos y Mellberg se desmarcó muy rápido de Ashley Cole para entrar en tromba y con cabezazo de bote al suelo puso arriba a los suecos (59).

Pero Inglaterra salió herida en su orgullo, casi no dejó festejar a los escandinavos y 4 minutos después el ingresado por Miller, Theo Walcott, metió un misil desde fuera del área, a la salida de un córner, que se metió por el centro del arco porque Isaksson quedó tapado por una marea de jugadores (63).

"Siempre es lindo saltar desde el banquillo y mostrar lo que uno puede hacer", dijo el atacante del Arsenal.
El orgullo inglés estaba por las nubes. Welbeck lo sintió y con esa genialidad, un taquito con pirueta enganchando un centro veloz por derecha de Walcott, que cambió el partido con su entrada, dejó a Inglaterra de fiesta.

"Estoy orgulloso de los jugadores, pero para ganar también hay que tener suerte. La tuvimos en nuestro primer gol, pero entre los dos partidos, no mucha", se lamentó el DT sueco, Eric Hamren.