Un niño y seis adultos heridos tras ataque de FARC contra tropa militar


DYMG - Globovisión/EFE 

Las FARC accionaron hoy un artefacto explosivo al paso de una tropa militar que patrullaba en una zona rural de Antioquia (noroeste) e hirieron a cuatro de los uniformados y a tres civiles, entre ellos un niño de 7 años, quienes fueron alcanzados por la onda expansiva.

El secretario de Gobierno antioqueño, Santiago Londoño, informó a periodistas de que el ataque se registró en una zona rural del municipio de Ituango, identificado como uno de los epicentros del conflicto armado en esa región.

Los heridos fueron trasladados en helicóptero hacia Medellín, la capital de Antioquia, donde se recuperan en distintos centros de salud.

Según explicó, el frente 18 de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) está detrás de ese hecho, que siguió a otro perpetrado a tan sólo 150 metros de distancia y en el que los guerrilleros lanzaron un artefacto contra una patrulla policial, cuyos pasajeros resultaron ilesos.

El comandante de la Policía de Antioquia, el general José Gerardo Acevedo, explicó a Caracol Radio que estas ofensivas se deben al 48 aniversario de esa unidad rebelde y agregó que la institución policial ha redoblado la seguridad en esa zona.

"Está todo el personal de la Policía Nacional ubicado en estos sitios neurálgicos en nuestro departamento, donde hay presencia de los facinerosos de las FARC", afirmó.

Por su parte, Londoño opinó en la misma emisora que además de combatir militarmente a las FARC hay que tratar de reducir el número de colaboradores civiles de que disponen en las poblaciones donde tienen influencia.

Mientras, el frente 15 de las FARC, que actúa en el sur del país, anunció en la madrugada de hoy que el próximo miércoles liberarán al periodista francés Roméo Langlois, quien mañana cumple un mes en poder de las FARC desde que fue hecho cautivo en el departamento del Caquetá (sur) cuando cubría las labores de un batallón antinarcóticos.

Las FARC anunciaron el pasado mes de febrero su intención de abandonar el secuestro con fines de financiación, aunque en los últimos meses han mantenido su estrategia de atentar contra los miembros de las fuerzas de seguridad de Colombia en distintos puntos del país.

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