OEA considera clave mantener el diálogo en Venezuela

El secretario general de la OEA dijo que si no había confianza entre las partes "existe el recurso de la mediación externa" OEA/CORTESIA

Aprobada declaración conjunta que llama a impulsar encuentros y soluciones

Ei Universal

Washington.- La Organización de Estados Americanos (OEA) decidió este viernes, por amplia mayoría, llamar a la continuación del "diálogo nacional" en Venezuela, una fórmula que satisfizo a Caracas y decepcionó a Estados Unidos, Panamá y Canadá, que lo interpretaron como una abierta validación de la respuesta del Gobierno de Nicolás Maduro a la crisis en el país que se afianzó con protestas el pasado mes de febrero.

En el segundo de dos días de sesión extraordinaria a puerta cerrada sobre Venezuela, y tras siete horas de reunión, el Consejo Permanente de la OEA aprobó una declaración conjunta con 29 votos a favor y 3 en contra -los de Estados Unidos, Panamá y Canadá- y con la ausencia de Bahamas y Grenada, destacó la agencia Efe.

La declaración fue recibida de inmediato por el representante venezolano, Roy Chaderton, como un "triunfo" no sólo para su país, sino "para la América Latina", mientras que Estados Unidos, Panamá y Canadá expresaron profundas discrepancias en sendas notas al pie de página del documento.

En Caracas, el Gobierno de Maduro celebró el viernes como una "victoria de la dignidad" la declaración de solidaridad del Consejo Permanente de la OEA.

El embajador venezolano en la OEA, Roy Chaderton, destacó la palabra "solidaridad" como esencial en el documento. "Es una victoria para la América Latina", señaló satisfecho Chaderton, a la salida de la sesión.

El texto fue presentado por Bolivia y no sufrió grandes modificaciones en el debate.

La declaración expresa condolencias por las víctimas registradas en las manifestaciones y pide avanzar de una vez en las investigaciones al respecto, rechaza la violencia y llama a respetar los derechos humanos; al tiempo que muestra "respeto al principio de no intervención en los asuntos internos de los Estados".

Además, la OEA expresa su "reconocimiento, pleno respaldo y aliento a las iniciativas y los esfuerzos del Gobierno democráticamente electo de Venezuela y de todos los sectores políticos, económicos y sociales para que continúen avanzando en el proceso de diálogo nacional, hacia la reconciliación política y social", con respeto "a las garantías constitucionales" y "por parte de todos los actores".

Ése fue el punto que más debate generó durante las 15 horas de debate formal divididas en dos días, dado que el primer proyecto de texto, presentado por Bolivia, expresaba un apoyo explícito a la Conferencia de Paz convocada por Maduro para solucionar la crisis, una mención que finalmente se eliminó por falta de consenso.

No obstante, Estados Unidos opinó que la expresión de "respaldo" a la continuación del "diálogo nacional" implica un apoyo a esa Conferencia de Paz "orquestada por un solo actor", algo que viola "la responsabilidad de la OEA de permanecer neutral".

"La declaración sólo ofrece un apoyo parcializado a un diálogo patrocinado por el Gobierno que ha sido rechazado por sectores importantes de la oposición", señaló Washington en su nota a pie de página.

En la misma línea, Panamá afirmó en su nota que ese punto puede leerse "como una parcialización hacia el Gobierno, frente al resto de los actores sociales", y que la alusión al "diálogo nacional puede interpretarse como que sólo apoyamos el diálogo actual".

Panamá, cuya insistencia en que se convocara la reunión en la OEA le ha valido la decisión de Venezuela de romper las relaciones diplomáticas bilaterales, considera que la propuesta "no es equilibrada" y la organización debería haber sido "más neutral", según dijo a periodistas el embajador panameño, Arturo Vallarino.

El objetivo por el que Panamá solicitó al Consejo Permanente convocar la reunión fue el de analizar la convocatoria de una reunión de cancilleres de todo el continente sobre el tema de Venezuela, algo que quedó descartado porque una mayoría de países lo consideraron "prematuro", según reconoció el propio Vallarino.

Tampoco prosperó una propuesta de Perú para que el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, hiciera informes periódicos al Consejo Permanente sobre la situación en Venezuela, una idea sensible ya que el Gobierno de Maduro ha expresado rotundamente su rechazo a cualquier intervención del organismo en el país.

En su lugar, el Consejo expresa en la declaración su "interés de mantenerse informado sobre la situación y el diálogo instaurado en Venezuela", sin especificar ningún mecanismo para ese seguimiento.

Los embajadores de Estados Unidos y Panamá aseguraron que continuarán el debate en el Consejo sobre Venezuela para encontrar ese mecanismo, y el segundo de ellos aseguró que, pese a que no se convocara a los cancilleres, su país cumplió su objetivo "de que se trajera el tema de la situación grave por la cual atraviesa Venezuela a la OEA", donde, pronosticó, el debate "se va a quedar por buen rato".

Analistas de los hechos estiman que los aliados de Venezuela en el continente impidieron que se solicitara una reunión de los cancilleres miembros de la OEA.

La embajadora de Estados Unidos, Carmen Lomellín, aupó la propuesta panameña para el encuentro, y dijo que la situación requería de un tercero que pudiera facilitar el diálogo, al tiempo que destacó la gravedad del asunto.

Comentarios