Muchos de los asistentes participaron ataviados de ropa de color negro, en señal del luto que embarga a los venezolanos por los sucesos de los últimos días.
El Universal-com
NORA SÁNCHEZ
Mérida.- En
horas de la tarde de este jueves, un nutrido grupo personas, entre estudiantes,
amas de casa, padres, profesionales, profesores, jóvenes liceístas y sociedad
civil en general, se concentraron en los alrededores del parque Glorias Patrias
para continuar con las manifestaciones que desde hace más de una semana
iniciaron los estudiantes en la ciudad.
Los merideños se concentraron de manera pacífica para insistir en la liberación de los estudiantes presos en la cárcel de Coro, el cese de la violencia, el rechazo a la criminalización y en repudio a la violencia generada el miércoles, donde tres personas perdieron la vida en Caracas y muchas resultaron heridas en otros estados del país, incluyendo Mérida.
Con las manos y las caras pintadas de blanco, los estudiantes ondearon banderas, sonaron pitos, cacerolas y mostraron pancartas que en las que expresaron "no somos criminales", "si los de abajo se mueven, los de arriba se caen".
Muchos de los asistentes participaron ataviados de ropa de color negro, en señal del luto que embarga a los venezolanos por los sucesos de los últimos días.
Invitaron además a la fuerza pública, que incluso custodiaba la manifestación, con sus equipos antimotín, a sumarse a la lucha de ese sector de la población que quiere un gobierno diferente.
La protesta pacífica se extendió por casi tres horas y recibió el respaldo de quienes por el lugar pasaron en vehículos y transporte público.
Los merideños se concentraron de manera pacífica para insistir en la liberación de los estudiantes presos en la cárcel de Coro, el cese de la violencia, el rechazo a la criminalización y en repudio a la violencia generada el miércoles, donde tres personas perdieron la vida en Caracas y muchas resultaron heridas en otros estados del país, incluyendo Mérida.
Con las manos y las caras pintadas de blanco, los estudiantes ondearon banderas, sonaron pitos, cacerolas y mostraron pancartas que en las que expresaron "no somos criminales", "si los de abajo se mueven, los de arriba se caen".
Muchos de los asistentes participaron ataviados de ropa de color negro, en señal del luto que embarga a los venezolanos por los sucesos de los últimos días.
Invitaron además a la fuerza pública, que incluso custodiaba la manifestación, con sus equipos antimotín, a sumarse a la lucha de ese sector de la población que quiere un gobierno diferente.
La protesta pacífica se extendió por casi tres horas y recibió el respaldo de quienes por el lugar pasaron en vehículos y transporte público.
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