La escasez y la inflación golpean el bolsillo de los más pobres


Limitaciones de producción coinciden con las fallas en la oferta de alimentos

EL UNIVERSAL 

Los alimentos más sensibles para la población, como harina precocida de maíz, pollo, arroz, leche, queso, pollo, aceite, margarina y azúcar, registraron a lo largo de 2012 niveles de escasez que variaron entre significativos y graves, según reveló el índice que mide la escasez en 33 productos en el Área Metropolitana de Caracas, elaborado por el Banco Central de Venezuela (BCV).

En diciembre se agravó la situación de abastecimiento de algunos rubros como harina precocida de maíz, cuyo nivel de escasez cerró en 43,3%; en harina de trigo 76,8%; en pollo, 31,5%; leche en polvo, 33,2; aceite vegetal, 67,1%; y azúcar, 78,1%; por mencionar algunos.

La ausencia de productos se suma al auge en los precios de los alimentos que subieron 5,7% en diciembre de 2012, según las cifras del Banco Central de Venezuela. Es la variación más alta desde abril de 2010.

Esto a pesar de que el Ejecutivo nacional ha contenido los ajustes de precios en los alimentos básicos y sólo permitió en 2012 el desplazamiento en azúcar, harina de maíz, café y arroz blanco.

Esta situación afecta principalmente a las personas del estrato social más bajo, quienes destinan 45% de su presupuesto a la compra de alimentos.

En diciembre la inflación en el estrato más pobre de la población fue de 4,5%, la más elevada de los últimos 32 meses.

Muchas veces, cuando los alimentos están escasos, se consiguen con sobreprecio en los canales no tradicionales como la economía informal o puntos de venta menos fiscalizados como abastos y bodegas.

El BCV también reconoció que hay desacato al control de precios en los rubros regulados que en agosto de 2012 se vendían con 53% de sobreprecio.

Manos oferta

El índice de escasez del BCV ratifica la contracción en producción de algunos alimentos básicos. Ese es el caso de los productos lácteos que con dificultad se consiguen en el mercado.

Durante 2012, la leche en polvo completa registró escasez de 67,1% en enero, nivel que fue descendiendo hasta cerrar el año con faltante de 33,2%, un índice considerado como "significativo" por el BCV. El año pasado la industria tuvo dificultad en el acceso a la materia prima que es importada por el Estado, así como trabas para adquirir envases, lo que restringió la oferta.

En el caso de la leche pasteurizada la escasez en agosto, septiembre y octubre osciló entre 42,6% y 44,4%, hasta cerrar en diciembre con 22,1%.

La industria ha reportado que debido al rezago de los precios y la falta de rentabilidad de la actividad, la producción se ha reducido considerablemente, situación que se traduce en menos oferta para atender la demanda.

Las limitaciones en la producción de aceites y grasas también afectó lo oferta al consumidor. La escasez de margarina se agudizó conforme pasaron los meses en 2012. De 6,3% de escasez registrada saltó a 28,6% al término de diciembre.

En aceite de girasol la ausencia fue de 100% en abril.

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