Fuertes lluvias afectan a 300 familias en el sector La Luz de Barinas

Inundaciones afectaron la parroquia La Luz de Barinas
Yonny Camacho / BARINAS

EL NACIONAL.com

***El desbordamiento del caño El Cucuaro ocurrido tras las lluvias de este domingo que se extendieron por hasta 5 horas dejó damnificada a una familia conformada por seis personas

Más de 300 familias de varios humildes caseríos del sector La Luz, en Barinas, resultaron afectadas por las inundaciones que provocaron los torrenciales aguaceros caídos durante el fin de semana en la entidad llanera.


Las precitaciones de casi 5 horas de este domingo, provocaron el desbordamiento del caño El Cucuaro en el caserío La Luchadora, jurisdicción del municipio Obispos, y una familia perdió su casa.

La mayoría de los afectados dijeron que las inundaciones en el sector afectaron por lo menos a seis humildes caseríos de La Luz.

Franklin Osorio y Julio Navas, habitantes del sector El Pajarote, informaron que además de este caserío rural, también resultaron afectados los sectores El Campesino, El Caipe, La Madera y La Luchadora, todos de la parroquia La Luz, del municipio Obispos.

"Pedimos acciones inmediatas del gobierno y de la alcaldía", manifestaban los habitantes de los referidos sectores ante la arremetida del caño El Cucuaro.

El desbordamiento de este caño provocó la destrucción de una modesta vivienda habitada por 6 personas, todas integrantes de una humilde familia que reclaman respuestas por parte de las autoridades.

Numan Orlando Altuve, damnificado, admitió haber perdido todo tras la crecida y posterior derrumbe de su vivienda.

"Ahora estamos desamparados y rogándole a Dios que alguien se apiade de nosotros", expresó conmocionado.

Recordó que desde hace tiempo no observa una situación de desastre como la registrada este domingo en la población de La Luz.

Los continuos aguaceros caídos durante los últimos días en Barinas han creado alarma, pese a la pasiva actuación de las autoridades competentes, quienes el pasado sábado aseguraron que no ha habido damnificados ni daños que lamentar.

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