Un espantoso suceso tuvo lugar en la madrugada de ayer viernes cuando un efectivo del Ejército venezolano asesinó a tres de sus compañeros cuando se encontraban en misiones de resguardo de un campo de PDVSA en el estado Anzoátegui.Así reseña el suceso el diario El Tiempo de Puerto La Cruz.
Cerca de las 3:00 de la madrugada de este viernes, tres efectivos del Ejército venezolano fueron asesinados por un compañero mientras resguardaban las instalaciones del campo operacional Nipa 9 de Petróleos de Venezuela (Pdvsa).
Esta estación se ubica cerca del sector Mata de Flores del municipio Freites, a unos 15 kilómetros de San Tomé, en la carretera que conduce a Juantino.
El soldado Francisco Figueroa Barrios (19) asesinó al recluta Jorge Torres Quijada y a los distinguidos Anthony José Betancourt Guzmán y Wilson Celis Urbina, todos de 20 años de edad, adscritos al 321 Batallón de Caribe Pedro Zaraza de Barcelona.
Figueroa disparó contra sus compañeros con su fusil Kalashnikov AK-47, dentro de una Toyota Machito, color blanco, sin placas, perteneciente al departamento de Prevención y Control de Pérdidas (PCP) de Pdvsa, que manejaba el operador Héctor Domínguez.
Al parecer, el homicida obligó a Domínguez bajo amenaza a que lo llevara al campo operacional Guara 3, ubicado a poca distancia del lugar donde cometió el triple crimen. Al llegar a ese sitio, el asesino arrojó los cadáveres de los militares.
El comandante del Destacamento 74 de la Guardia Nacional, teniente Samuel Contreras, informó que el soldado obligó al operador de Pdvsa a llevarlo a su casa en San José de Guanipa, de donde sustrajo dinero y ropa.
“Posteriormente se dirigieron a la urbanización Virgen del Valle de El Tigre, donde un grupo esperaba en otro vehículo en el que hicieron trasbordo”. En un descuido, Domínguez escapó y se escondió.
El homicida huyó llevándose dos fusiles Kalashnikov AK-47 y una escopeta calibre 12 con siete cartuchos que les había quitado a sus compañeros.
Posible vinculación
Luego de dejar abandonado el Toyota Machito en la calle Los Almendrones de Virgen del Valle, al parecer intentaron despojar de una Chevrolet Gran Vitara, color bronce, placas KBE-52M, a dos mujeres que se desplazaban por la avenida Jesús Subero, entre la urbanización San Antonio y Virgen del Valle.
En vista de que las ocupantes del carro no se detuvieron, les efectuaron varios disparos. La conductora del vehículo fue alcanzada por un tiro, pero logró llegar a una clínica en la avenida Winston Churchill.
Yuraima Cárdenas (43) recibió dos balazos en el intercostal derecho y su acompañante Vanessa Arcia (22) resultó herida en el antebrazo derecho.
Las autoridades investigan si ese tiroteo guarda relación con el soldado fugado.
Una vez informados de la situación, un grupo de militares se desplegó por toda la zona operacional de Pdvsa, para instalar puntos de control.
El equipo de El Tiempo se trasladó al sitio e intentó llegar al lugar del suceso, pero resultó imposible.
Aproximadamente a las 9:15 am, bajo la custodia del Ejército y funcionarios de la División de Inteligencia Militar, los cadáveres de los militares fueron ingresados en la morgue del hospital Guevara Rojas de El Tigre.
Allí le observaron a Torres un disparo en el lado izquierdo del cuello con salida por el derecho, Los dos distinguidos tenían impactos de bala en la región pectoral.
Averiguaciones
El jefe de la subdelegación del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), comisario Jhonny Salazar, destacó que junto con efectivos de la Guardia Nacional, DIM y del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), realizan las experticias en el lugar del suceso para recabar evidencias.
Aunque efectivos castrenses arrestaron a un hombre para averiguaciones, el jefe policial aclaró que no hay detenciones oficiales por este caso.
Se conoció que el fiscal militar 42, capitán Oswaldo Suárez Perozo, se halla en la zona, y junto con la Fiscalía IV de El Tigre llevarán las investigaciones del caso.
El acordonamiento militar continuará hasta localizar al desertor Francisco Figueroa.
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