En horas de la tarde de ayer martes, cientos de personas acompañaron a la familia del futbolista Gustavo Durán, a los diferentes actos que se realizaron como tributo a esta joven gloria deportiva que lo entregó todo por la camiseta rojiblanca, y que lamentablemente falleciera en un accidente automovilístico.
El gobernador Marcos Díaz Orellana, acompañado por algunos miembros del tren ejecutivo, encabezó la ceremonia de despedida a este gran atleta del deporte merideño, quien fuera destacado medio campista del equipo Estudiantes de Mérida Fútbol Club.
El mandatario regional, manifestó su pesar por el deceso del deportista. “Gustavo Durán fue una promesa que se hizo realidad con el fútbol merideño. A sus 25 años aún era mucho el camino que tenía por recorrer para disfrute de la fanaticada. Se distinguió por ser un excelente profesional y por ello quedará grabado por siempre en el corazón de los emeritenses, y de los que de alguna manera están ligados al balompié merideño”.
Igualmente, Díaz Orellana informó que a través de una llamada telefónica, el Presidente Hugo Chávez expresó sus palabras de condolencia a familiares, amigos del deportista y al pueblo merideño, este último, apasionado por este deporte aquí en la entidad.
Por su parte, Alcides Monsalve, director del equipo Estudiantes de Mérida expresó su pesar por tan irreparable pérdida. “En nombre de la directiva, lamentamos muchísimo la desaparición física de Gustavo Durán. Digo física, porque sé que su cariño por el equipo y su afición por el fútbol quedarán presentes en nuestros corazones. Hoy más que nunca, le rendiremos tributo a alguien que fuera y dentro del terreno de juego demostró ser una persona ejemplar”.
Dijo que la muerte de Gustavo Durán fue una perdida para el fútbol nacional, especialmente para el equipo rojiblanco.”A sus familiares le damos nuestras más sinceras palabras de condolencia y les reiteramos, que seguiremos trabajando para cumplir los sueños de Gustavo y otros jugadores que quieren ver un equipo fortalecido y grande”, precisó Monsalve.
El último adiós
Durante las honras fúnebres, el féretro de Durán recorrió por última vez las instalaciones del Estadio Guillermo Soto Rosa, posteriormente se ofreció una misa en la iglesia San José Obrero, para luego trasladar el cuerpo del futbolista al Palacio de Gobierno, donde permaneció en capilla ardiente. Sus restos tuvieron cristiana sepultura en el campo santo de “El Espejo”. Prensa/OCI/Elianira Gutiérrez. Fotos: Néstor Tarazona
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