Robado Movistar del Cubo Rojo

El turno le tocó ayer al Centro Comercial El Cubo Rojo. / Foto: Benjamín López

**** A plena luz del día y a escasas dos cuadras de la Comandancia de Policía de Mérida, sujetos con armas de fuego caminan tranquilamente por las principales calles y avenidas de la ciudad.

Judith Vega

Distintos robos se han producido en las últimas semanas en los principales centros comerciales de la ciudad, el turno le tocó ayer a la empresa Movistar ubicada en el Cubo Rojo, avenida Francisco de Miranda adyacente al sector Gonzalo Picón.

A las 11:30 de la mañana de ayer, un sujeto ingresó al local y preguntó por los celulares más costosos, como es lógico la persona que le atendía le señaló los equipos. Seguidamente el hombre salió del negocio y se apostó en la esquina de la avenida Don Tulio Febres Cordero e inmediatamente dos sujetos armados con pistola calibre 38 ingresaron al local y traspasaron el mueble de atención a los clientes, dirigiéndose hacia los equipos más caros.

La propietaria del establecimiento salió corriendo y gritando para lograr llamar la atención de otros comerciantes y transeúntes. Uno de los sujetos igualmente corrió hacia la avenida Don Tulio, llevándose un blackberry de seis mil bolívares fuertes, mientras que el segundo hombre se quedó en el local guardando en un bolso el resto de los equipos.

Uno de los empleados al observar la situación se le abalanzó al ladrón y lo dominó, entre tanto un grupo de jóvenes que en los últimos días se ubican en diferentes semáforos de la ciudad alertando sobre medidas de seguridad para evitar accidentes de tránsito, observaron que uno de los sujetos corría por la Don Tulio, lo siguieron y lo atraparon metros arriba.

Posteriormente lo llevaron hasta la tienda de teléfonos y allí fueron entregados a funcionarios del Cicpc.

Además en horas de la tarde, también de ayer, una dama estacionó su vehículo en las inmediaciones del centro comercial para dirigirse a una empresa de encomiendas. Al salir se encontró con la sorpresa que el frontal de su equipo de sonido y su laptop habían sido sustraídas.

Los comerciantes, quienes solicitaron mantener en reserva sus nombres, manifestaron que el sector se ha convertido en “zona roja” y solicitan mayor vigilancia policial.