Cuatro policías del GRIM sufren aparatoso accidente

Los funcionarios fueron ingresados a la emergencia del Iahula. (Foto: Benjamín López)

**** El hecho se produjo en el elevado que conduce al estadio Metropolitano. Los motorizados fueron llevados al Iahula donde permanecen hospitalizados. Dos de ellos cayeron a la avenida Monseñor Chacón y su estado es delicado.


Judith Vega


A las 6:00 de la tarde de ayer, efectivos policiales pertenecientes al Grupo de Reacción Inmediata (GRIM) sufrieron un lamentable accidente de tránsito en el elevado que comunica al estadio Metropolitano.

Las comisiones conformadas por cuatro personas se desplazaban a bordo de dos motos desde la ciudad de Ejido para Mérida. La primera pareja conformada por el Cabo Segundo José Ramón Toro Rojas, de 35 años y el Agente Jhonny José Silva Varela, de 21 años, conforme a lo informado por testigos del hecho, tomaron la curva muy cerrada, lo que originó que se estrellaran contra las defensas del puente para posteriormente caer al vacío, en el canal de subida de la avenida Monseñor Chacón, cerca de la entrada al sector de Pan de Azúcar.

La segunda pareja, conformada por el Distinguido Ricardo Mosquera y la Agente Maylín Hernández, ambos de 27 años, para evitar chocar con la moto de sus compañeros, pues esto implicaría que ellos también cayeran al vacío, optaron por derrapar en la pequeña unidad.

Bomberos y Policía de Mérida atendieron a los funcionarios y los trasladaron al Iahula, donde fueron ingresados a las 6:20 de la tarde. Los galenos le diagnosticaron al Cabo Segundo Toro Rojas y al Agente Silva Varela, traumatismo encéfalo craneal complicado cerrado y fracturas en varias partes del cuerpo, lesiones que los mantienen en estado delicado, mientras que al Distinguido Mosquera le fue diagnosticada fractura en muñeca derecha y múltiples excoriaciones y a la Agente Hernández, fractura en codo derecho y excoriaciones.

Al cierre de esta edición se conoció que Mosquera y Hernández fueron dados de alta, mientras que Toro y Silva fueron exitosamente estabilizados, pese al delicado estado de salud.