CNP fija posición sobre ley en contra de los delitos mediáticos


CNP


**** A través de un comunicado, el Colegio Nacional de Periodistas (CNP) advirtió que la eventual aprobación de una presunta ley “en contra de los delitos mediáticos”, tal y como lo ha sugerido la Fiscal General de la República, Luisa Ortega Díaz podría impedir el ejercicio de la crítica y del periodismo nacional.



En el texto el CNP, señala que "los delitos ya están tipificados en la Constitución y las leyes vigentes; no necesitamos más. La sola expresión Delito Mediático se explica por sí sola".
Sostienen que la nueva ley "constituye un ardid poetico-jurídico fraguado por los instrumentos estatales para impedir el ejercicio de la crítica y del periodismo; para criminalizar y neutralizar las posiciones editoriales que no le convengan al gobierno nacional y para intimidar a toda la sociedad venezolana con un arma: la posibilidad de sanciones penales usadas a discreción contra quienes se tomen el atrevimiento de publicar reportajes inconvenientes, o denuncias que lastimen los intereses de los poderosos, o insumos que contradigan la propaganda oficial".
"El gobierno nacional sabe que el trabajo de periodistas, medios de comunicación y articulistas contradice la discutible versión de la realidad que ofrecen los medios oficiales y está haciendo todo lo posible por neutralizarlos", expresan.
Explican en el documento que una muestra de la censura "es la prohibición del spot del Cedice en el cual se defiende la propiedad privada. Independientemente de las opiniones que se puedan tener sobre el fondo del mensaje, el gobierno acude al expediente de la censura porque lo dicho le molesta y lo deja en evidencia".
Esboza el gremio periodístico en el documento que "los venezolanos ya sabemos lo que significan en castellano este tipo de ardides. Delito mediático se parece demasiado a no renovación de concesión o a democratización del espectro radioeléctrico cuando quiere maquillar aquello que prometió jamás hacer: cerrar un canal de televisión, clausurar radios o aplicar, en términos policiales, la censura".
El CNP insta a reflexionar a la Fiscal Ortega Díaz, "así como a los parlamentarios que tanto se devanan los sesos buscando caminos legales para ponerle apellidos o trabas legales al ejercicio de la libertad. En Cuba, por ejemplo, un cargo judicial por propaganda enemiga le puede acarrear décadas de cárcel, no sólo En el texto el CNP, señala que "los delitos ya están tipificados en la Constitución y las leyes vigentes; no necesitamos más. La sola expresión Delito Mediático se explica por sí sola".
Sostienen que la nueva ley "constituye un ardid poetico-jurídico fraguado por los instrumentos estatales para impedir el ejercicio de la crítica y del periodismo; para criminalizar y neutralizar las posiciones editoriales que no le convengan al gobierno nacional y para intimidar a toda la sociedad venezolana con un arma: la posibilidad de sanciones penales usadas a discreción contra quienes se tomen el atrevimiento de publicar reportajes inconvenientes, o denuncias que lastimen los intereses de los poderosos, o insumos que contradigan la propaganda oficial".
"El gobierno nacional sabe que el trabajo de periodistas, medios de comunicación y articulistas contradice la discutible versión de la realidad que ofrecen los medios oficiales y está haciendo todo lo posible por neutralizarlos", expresan.
Explican en el documento que una muestra de la censura "es la prohibición del spot del Cedice en el cual se defiende la propiedad privada. Independientemente de las opiniones que se puedan tener sobre el fondo del mensaje, el gobierno acude al expediente de la censura porque lo dicho le molesta y lo deja en evidencia".
Esboza el gremio periodístico en el documento que "los venezolanos ya sabemos lo que significan en castellano este tipo de ardides. Delito mediático se parece demasiado a no renovación de concesión o a democratización del espectro radioeléctrico cuando quiere maquillar aquello que prometió jamás hacer: cerrar un canal de televisión, clausurar radios o aplicar, en términos policiales, la censura".
El CNP insta a reflexionar a la Fiscal Ortega Díaz, "así como a los parlamentarios que tanto se devanan los sesos buscando caminos legales para ponerle apellidos o trabas legales al ejercicio de la libertad. En Cuba, por ejemplo, un cargo judicial por propaganda enemiga le puede acarrear décadas de cárcel, no sólo En el texto el CNP, señala que "los delitos ya están tipificados en la Constitución y las leyes vigentes; no necesitamos más. La sola expresión Delito Mediático se explica por sí sola".
Sostienen que la nueva ley "constituye un ardid poetico-jurídico fraguado por los instrumentos estatales para impedir el ejercicio de la crítica y del periodismo; para criminalizar y neutralizar las posiciones editoriales que no le convengan al gobierno nacional y para intimidar a toda la sociedad venezolana con un arma: la posibilidad de sanciones penales usadas a discreción contra quienes se tomen el atrevimiento de publicar reportajes inconvenientes, o denuncias que lastimen los intereses de los poderosos, o insumos que contradigan la propaganda oficial".
"El gobierno nacional sabe que el trabajo de periodistas, medios de comunicación y articulistas contradice la discutible versión de la realidad que ofrecen los medios oficiales y está haciendo todo lo posible por neutralizarlos", expresan.
Explican en el documento que una muestra de la censura "es la prohibición del spot del Cedice en el cual se defiende la propiedad privada. Independientemente de las opiniones que se puedan tener sobre el fondo del mensaje, el gobierno acude al expediente de la censura porque lo dicho le molesta y lo deja en evidencia".
Esboza el gremio periodístico en el documento que "los venezolanos ya sabemos lo que significan en castellano este tipo de ardides. Delito mediático se parece demasiado a no renovación de concesión o a democratización del espectro radioeléctrico cuando quiere maquillar aquello que prometió jamás hacer: cerrar un canal de televisión, clausurar radios o aplicar, en términos policiales, la censura".
El CNP insta a reflexionar a la Fiscal Ortega Díaz, "así como a los parlamentarios que tanto se devanan los sesos buscando caminos legales para ponerle apellidos o trabas legales al ejercicio de la libertad. En Cuba, por ejemplo, un cargo judicial por propaganda enemiga le puede acarrear décadas de cárcel, no sólo a un periodista, sino a un activista o a un ciudadano cualquiera".

Comentarios