Aumenta a 108 el número de muertos en los fuegos del sur de Australia












La ola de incendios es ya más mortífera en la historia de Australia.- El Gobierno ordena el despliegue del Ejército

La peor ola de incendios de la historia de Australia se ha cobrado ya la vida de 108 personas y ha destruído más de 600 casas en el sur del país. El Gobierno australiano ha ordenado el despliegue del Ejército para combatir los incendios que han arrasado amplias zonas de los estados de Australia del Sur y Victoria. El recuento policial de víctimas ha ido en aumento en un goteo incesante a lo largo de las últimas horas, a medida que los equipos de rescate han logrado acceder a los lugares afectados por las llamas, donde han encontrado cuerpos carbonizados en coches y casas.
El drama que vive Australia estos días ha superado al vivido durante el llamado Miércoles de Ceniza, que dejó unos 50 muertos en Victoria y otros 28 en Australia del sur, en febrero de 1983. "Ha sido una tragedia absoluta para el estado y creemos que la cifra sólo empeorará" ha declarado el subcomisario de Policía de Victoria, Kieran Walshe. La zona más afectada es el área situada al norte de la ciudad de Melbourne.

Muchas víctimas han perecido dentro de sus vehículos cuando intentaban escapar de los incendios. "El infierno con toda su furia ha visitado a las buenas personas de Victoria en las últimas 24 horas. Es una tragedia para la nación", ha declarado el primer ministro australiano, Kevin Rudd, que visitó la región a primera hora de este domingo y ha anunciado un fondo de 10 millones de dólares australianos para los afectados (seis millones de dólares).

Focos fuera de control

El Gobierno ha puesto al Ejército bajo alerta y ha desarrollado fondos de emergencia para facilitar las labores de rescate y evacuación. Miles de bomberos y voluntarios siguen luchando contra el fuego en nueve focos que arden fuera de control en el Estado, donde el calor ha bajado considerablemente. "Solamente ahora hemos empezado a entrar en las zonas de los incendios. Ha hecho falta algún tiempo antes de que el área fuese segura para que pudiera entrar la policía y el personal de los servicios de urgencia en estas zonas, ahora detrás de los incendios", ha explicado ha declarado el subcomisario de Policía de Victoria, Kieran Walshe. Los daños exactos provocados por las llamas no se conocerán hasta que las autoridades puedan entrar en muchas de las ciudades que permanecen aisladas por el fuego.

Los incendios forestales son un fenómeno habitual en Australia. Pero este año, la combinación de las altas temperaturas y la seguía han causado que las llamas se hayan extendido con mayor fuerza y rapidez de lo habitual. (Tomada de: El Pais.com)

Comentarios